A sus 71 años, Rigoberto Esquipulas Molina duerme con la tranquilidad que por décadas anheló: saber que su familia tiene un hogar seguro, un lugar para sus hijos y nietos.
Después de 30 años de espera, Rigoberto finalmente recibió el título de propiedad de su vivienda en el asentamiento Mario Alioto Sánchez, zona 4 de Villa Nueva. Gracias al apoyo de la Unidad para el Desarrollo de Vivienda Popular (UDEVIPO) del Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (CIV), pudo tramitar su escritura sin costo, asegurando que su esfuerzo de toda una vida no haya sido en vano.
“Mi familia tiene un techo donde vivir sin pasar penas en la calle”, expresa con alivio, sentado en la habitación que comparte con su esposa, hijos y nietos.
Hace 30 años, cuando llegó al asentamiento, todo era monte y tierra. Con sus propias manos, emparejó el suelo y construyó su primera covacha,
Día tras día, su trabajo como vendedor de chucherías en ferias de pueblo le permitió mejorar su vivienda. Poco a poco, las láminas se convirtieron en paredes de block, y su hogar tomó forma.
Rigoberto es una de las 355 familias que recibieron su escritura como parte del proceso de escrituración masiva impulsado por UDEVIPO y el CIV. Este programa está dirigido a familias en situación de pobreza que han vivido en terrenos del Estado, brindándoles certeza jurídica, estabilidad y acceso a servicios básicos.
El Gobierno de Guatemala y el Ministerio de Comunicaciones continúan con su compromiso de proveer vivienda digna a quienes más lo necesitan. Este proceso no solo entrega papeles, entrega estabilidad, paz y oportunidades para cientos de familias que han esperado por años.
Para Rigoberto, su título de propiedad es la certeza de que su familia siempre tendrá un hogar.