En el marco del fortalecimiento de las estrategias nacionales para la protección de los cultivos de banano y plátano, la viceministra de Sanidad Agropecuaria y Regulaciones, Mayra Motta, sostuvo una reunión de alto nivel con representantes de la Misión del Gobierno de la República de China-Taiwán.
Durante el encuentro, celebrado en las instalaciones del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación, se presentaron los principales aportes técnicos y tecnológicos que Taiwán ha realizado en el país, como parte del Proyecto Regional de Prevención y Control del Fusarium Raza 4 Tropical (R4T) en Centroamérica, una iniciativa clave para preservar la competitividad agrícola en la región.
Las intervenciones destacadas incluyen el uso de vigilancia epidemiológica avanzada mediante monitoreo satelital, y la próxima incorporación de tecnologías innovadoras como biochips nanoestructurados y drones especializados en inspección agrícola para la detección temprana de enfermedades y residuos de plaguicidas.
En la reunión también participaron Rosario Gómez, en representación del Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA); Jorge Mario Gómez, director de Sanidad Vegetal del MAGA; así como expertos de la misión técnica de Taiwán.
La cooperación internacional es fundamental para reforzar las capacidades del país en materia de prevención, diagnóstico y bioseguridad, especialmente ante la amenaza del hongo Fusarium oxysporum f. sp. cubense Raza 4 Tropical (Foc TR4), causante de la enfermedad conocida como marchitamiento, que afecta a las musáceas en diversas regiones del mundo.
Guatemala es el tercer exportador mundial de banano, con 74 mil hectáreas cultivadas y exportaciones anuales que superan los 1060 millones de dólares, lo que representa aproximadamente el 10% del total de las exportaciones agrícolas del país. Proteger este sector es vital para la economía nacional y la seguridad alimentaria.
Desde el MAGA se reafirma el compromiso de continuar impulsando alianzas estratégicas, innovación tecnológica y medidas preventivas para garantizar una producción sostenible, resiliente y libre de enfermedades, en beneficio del pueblo digno.