Un grupo de técnicos miembros de la Dirección de Coordinación Regional y Extensión Rural (DICORER), personal del Viceministerio de Desarrollo Económico Rural (VIDER) y de la Unidad de Cambio Climático, del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), participaron en un taller de formación relativo a la Adaptación Basada en Ecosistemas (EBA) y en gestión integrada del riesgo climático en instituciones financieras,
Durante la capacitación se abordaron temas clave como: conceptos básicos sobre financiamiento, el Crédito Tob’anik, financiamiento sostenible, medidas de adaptación basadas en ecosistemas (ABE) al cambio climático y la gestión integral del riesgo climático en el sector financiero.
Uno de los ejes principales consistió en la presentación del Fondo de Crédito para los Pequeños y Medianos Productores Agrícolas, un fondo revolvente destinado a otorgar créditos en condiciones favorables a los agricultores de pequeña y mediana producción, con el propósito de financiar actividades agrícolas, con la obligatoriedad de un seguro agrícola para protegerlos contra eventos climáticos adversos.
En cuanto al Crédito Tob’anik, ahí pueden aplicar dos tipos de productores: el pequeño que se caracteriza por utilizar su producción tanto para consumo familiar como para la venta de excedente; y el mediano, que contrata mano de obra externa y vende la mayor parte de su producción.
La Adaptación basada en Ecosistemas en América Latina rural (EBA LAC), es un programa regional implementado en Guatemala, Costa Rica y Ecuador, cuyo propósito es fortalecer la resiliencia al cambio climático de las comunidades rurales por medio de medidas de Adaptación basada en Ecosistemas (AbE).
En Guatemala, el programa se desarrolla en conjunto entre el MAGA, MARN, INAB, CONAP y gobiernos locales, promoviendo prácticas sostenibles como sistemas agroforestales (SAF), diversificación de la milpa, restauración de paisajes, conservación de fuentes de agua y fortalecimiento de capacidades locales y comunitarias.
En esta actividad el programa EBA LAC, busca aumentar la capacidad de resiliencia al cambio climático de las comunidades y los ecosistemas vulnerables en las zonas rurales de Guatemala.
El mecanismo financiero también tiene como objetivo incrementar la participación del sector financiero comercial en la implementación de medidas de adaptación y transferencia de riesgos, al mismo tiempo que las entidades financieras reducen su riesgo de financiero de origen climático.