Ciudad del Vaticano, 29 de septiembre de 2025.. A solicitud de la Embajada de Guatemala ante la Santa Sede, Su Excelencia Reverendísima Monseñor Paul Richard Gallagher, Secretario para las Relaciones con los Estados, presidió la ceremonia eucarística, en ocasión del 204º. aniversario de la independencia de los países centroamericanos, la cual se llevó a cabo el 18 de septiembre en la Basílica di San Lorenzo in Damaso, Palacio de la Cancillería de la Santa Sede.
Monseñor Paul Richard Gallagher se congratuló con la celebración de la independencia de los países centroamericanos y expresó la cercanía y afecto que la Iglesia siempre ha mantenido con sus pueblos. Asimismo, expresó que la región siempre se ha caracterizado por buscar el diálogo y la paz, lo cual ha fortalecido las relaciones diplomáticas con la Santa Sede.
La Santa Misa fue concelebrada por Monseñor Francisco Díaz Tenza, Director de Centroamérica y el Caribe de la Secretaría de Estado; Monseñor José Brosel, Rector de la Iglesia Nacional Española de Santiago y Montserrat; sacerdotes guatemaltecos de la Arquidiócesis de Santiago de Guatemala y por sacerdotes centroamericanos. En la celebración eucarística en referencia participó el coro de las Hermanas de la Congregación guatemalteca “Marta y María”, quienes sirven en instituciones de la iglesia católica en Italia y en las nunciaturas de la Santa Sede.
El Embajador de Guatemala, Alfredo Vásquez Rivera, en su calidad de Decano de los Embajadores de Centroamérica, hizo la Oración de los Fieles por nuestros Gobernantes y la paz: “Oremos para que conduzcan a la sociedad internacional al progreso, para que exista armonía, solidaridad y entendimiento. Para que favorezcan el diálogo, la convivencia y la comprensión que permita vivir en paz y fraternidad. Que los gobernados apoyen a los gobernantes con su participación y sobre todo con buena disposición, con el único interés de contribuir para alcanzar el bien común nacional e internacional”.
La celebración de independencia contó con la presencia del Cuerpo Diplomático acreditado ante la Santa Sede, autoridades eclesiásticas, así como autoridades de las Pontificias Universidades.
Al finalizar la ceremonia eucarística, las Misiones Diplomáticas ofrecieron una recepción en donde los invitados degustaron comida típica de Guatemala, El Salvador, Honduras y Costa Rica.