La población de Guanagazapa ya puede contar con una vía de ingreso y salida segura gracias a la instalación de un puente Bailey, estructura habilitada por la Dirección General de Caminos (DGC), para evitar que el paso se vea interrumpido durante la temporada de lluvias en caso del desbordamiento del río Platanares.
La obra, ejecutada por la División de Mantenimiento de Caminos, consiste en un puente metálico modular, portátil y prefabricado, diseñado especialmente para garantizar el tránsito vehicular en zonas de riesgo. Esta estructura temporal será clave para mantener el paso fluido mientras avanza la construcción del puente Platanares de concreto, parte del proyecto estratégico del Anillo Regional C-50.
El puente Bailey instalado consta de dos vías de 7.35 metros, una longitud 27.45 metros, es de estructura de acero galvanizado, y está diseñado para soportar cargas pesadas de hasta 32 toneladas, incluyendo el tránsito de transporte liviano, camiones y maquinaria. Es de alta resistencia a condiciones climáticas extremas y una vida útil que, en contextos de emergencia, puede extenderse por varios años sin comprometer su funcionalidad.
Estas características lo convierten en una solución efectiva para regiones que, como Guanagazapa, presentan vulnerabilidades ante fenómenos hidrometeorológicos recurrentes.
El puente Platanares, en construcción paralela, será una obra permanente que forma parte del Anillo Regional C-50, infraestructura clave que busca descongestionar el tránsito por la ciudad capital, reduciendo tiempos y costos de transporte para quienes se movilizan entre la costa sur y el centro del país.
Esta intervención no solo mejora la conectividad del municipio con otras áreas de Escuintla, sino que representa una respuesta directa a las demandas de la comunidad, que ha sufrido interrupciones viales durante la época lluviosa.
La instalación forma parte del Plan Conecta 2025, la estrategia del CIV que impulsa una infraestructura vial pensada en las necesidades reales de la población guatemalteca.