Las frutas son un producto agrícola que ofrece una amplia gama de beneficios, no sólo para la salud y el medio ambiente, sino que también en la economía. Además de tener un delicioso sabor y apariencia colorida, es importante conocer algunas generalidades sobre ellas.
Las frutas son productos comestibles que se obtienen de plantas, ya sea cultivadas por el hombre o porque crecen de forma silvestre. Destaca su sabor dulce o agridulce, las hay con diferentes colores, aromas, sabores y texturas que ofrecen una experiencia placentera en su consumo.
Las frutas pueden clasificarse de varias maneras, por ejemplo, según el lugar donde se producen:
Frutas de clima templado a frío: ciruela, durazno y manzana.
Frutas tropicales o sub-tropicales: se cultivan en climas cálidos y con alta humedad, como el banano, el mango, la piña y el maracuyá.
También tenemos la clasificación por sus características comunes, o sabores.
Frutas cítricas: crecen en arbustos perennes y sus frutos son ricos en vitamina C. Se caracterizan por su sabor ácido, como el limón, la naranja y la mandarina.
Frutos del bosque: son los de arbustos silvestres como la mora, la frambuesa y la fresa.
Al momento de seleccionar y comprar las frutas se recomienda:
• Escoger las de temporada o las que se producen en mayor cantidad.
• Observar que la fruta no esté dañada (sin magulladuras, piel desgarrada, manchas u olor desagradable).
• Seleccionar la fruta que tiene pulpa firme y no dejarse llevar por el tamaño, ya que esto no es necesariamente un indicador de calidad y sabor.
• Escoger la madurez de la fruta de acuerdo al tiempo en que se va a consumir.
• La fruta madura y que no es apta para consumirse fresca, se puede emplear para hacer jaleas, o mermeladas.
• Adquiera únicamente las cantidades de fruta necesarias.
