La Antigua Guatemala fue escenario de una emotiva jornada literaria con la participación de más de 200 estudiantes graduandos del Instituto Normal para Varones “Antonio Larrazábal” —hoy mixto—, quienes se reunieron en las instalaciones de Antigua Hills para rendir homenaje a Miguel Ángel Asturias, Premio Nobel de Literatura 1967.
La actividad tuvo como invitado especial al escritor Gonzalo Asturias Montenegro, sobrino del célebre autor guatemalteco, quien participó en un conversatorio junto al literato Pablo Bejarano. Durante el encuentro, ambos abordaron distintos aspectos de la vida y obra de Miguel Ángel Asturias, destacando su influencia en la literatura universal y su rol como precursor del realismo mágico.
Pablo Bejarano profundizó en la trascendencia de obtener un Premio Nobel de Literatura, señalando cómo la identidad cultural guatemalteca influyó en la obra de Asturias. También analizó el uso de complejas técnicas literarias presentes en sus escritos y el reconocimiento que estas recibieron en Europa.
Por su parte, Gonzalo Asturias Montenegro ofreció una mirada íntima al legado del Nobel, relatando anécdotas personales vividas junto a su tío, especialmente durante una estancia compartida en Roma. Habló sobre el contexto histórico en el que fue escrita El señor presidente, y cómo las circunstancias políticas y sociales de la época influyeron en la obra del autor.
El conversatorio incluyó una nutrida ronda de preguntas en la que más de treinta estudiantes interactuaron con el invitado especial, interesados en conocer más sobre la obra, la vida familiar del Nobel, y consejos literarios de parte de Gonzalo Asturias.
Uno de los momentos más emotivos fue la declamación sorpresa del poema Cómo me dueles Guatemala, de autoría de Gonzalo Asturias, a cargo de la estudiante Merly Alejandra Raxón Quiroa, con el apoyo del profesor Manuel Estrada y Samuel Santos Barreondo.
La jornada concluyó con la lectura del poema Oración al arcángel de mi nombre, escrito por Miguel Ángel Asturias, en voz de su propio sobrino, como homenaje en el 51 aniversario luctuoso del escritor guatemalteco.
Este evento no solo permitió celebrar la memoria de un ícono de las letras hispanoamericanas, sino que también inspiró a una nueva generación de jóvenes a valorar y continuar el legado literario nacional.