La directora de la Editorial, Hanna Orellana Beitze, junto con la autora Ana Isabel Villela, leyó fragmentos del libro “Tomás bajo el almendro”.
Una historia universal
El libro narra la tierna historia de Tomás, que se sienta bajo un almendro a contar las hojas que este va perdiendo, mientras espera el regreso de su padre, que marchó lejos en un barco en busca de trabajo con la promesa de volver. Este tierno relato ilustra la dureza de la condición migrante, ofreciendo un final de feliz reencuentro. La narración emocionó profundamente a los niños presentes, quienes escuchaban embelesados.
Hanna Orellana Beitze destacó la importancia de estas acciones: “Este tipo de actividades son importantes porque, no importando las circunstancias que atravesemos, el arte debiera ser un derecho. Todo ser humano necesita el contacto con lo bello, y una manera en la que el arte se expresa es a través de los libros”.
La directora de EC añadió que libros como “Tomás bajo el almendro” no solo permiten identificar las realidades que nos rodean, “sino conectar unos con otros, entendiendo que tenemos mucho en común, que todos buscamos mejores oportunidades y algunas personas se ven forzadas a mudarse de país para poderlas encontrar”.
Cuentos, diversión y convivencia
También asistió el cuentacuentos Víctor Paz (Vicocuentos), quien encantó con su show al auditorio, compuesto por hombres, mujeres y niños de origen hondureño, colombiano y venezolano.
La Editorial Cultura al terminar la jornada donó ejemplares de “Tomás bajo el almendro” y de “Corazón de papel”, obra de Javier Vides Llarena, ganadora del premio Marilena López de novela juvenil 2024. Finalmente, los organizadores compartieron un refrigerio con los albergados.