Alberto Carrera, licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad Rafael Landívar y en Literatura Española por la Universidad de San Carlos de Guatemala, dedicó su vida a las letras, la reflexión y la difusión cultural, construyendo una trayectoria marcada por la intensidad intelectual y la sensibilidad humana.
Fue miembro del grupo literario guatemalteco RIN 78, considerado vanguardista en su época y del cual formaron parte destacadas figuras como Luz Méndez de la Vega, Ana María Rodas y Dante Liano.
La Editorial Cultura del MCD publicó varias de sus obras, entre ellas: “En el ataúd del incrédulo”, “Rubén Darío, Enrique Gómez Carrillo y el modernismo”, “Cómo era Miguel Ángel Asturias”, “Diorama sobre la obra de Miguel Ángel Asturias” “Hogar, dulce hogar”, y “La escritora y Martel”. De estos títulos, solo los dos últimos permanecen vigentes dentro del catálogo editorial.
En 1997, el Rey Juan Carlos I de España, hoy emérito, le otorgó la Orden Isabel la Católica en el grado de Gran Cruz por su aporte a la difusión del idioma español.
Un año después, en 1998, fue galardonado con el premio único de cuento de la Fundación Carlos F. Novella. Posteriomente, en 1999, Carrera recibió el Premio Nacional de Literatura “Miguel Ángel Asturias”.
Además de su labor literaria, Alberto Carrera fue columnista en medios como El Gráfico, Siglo Veintiuno y Revista Crónica. Asimismo, representó al país como embajador en Colombia, Grecia e Italia. Su partida apaga una de las luces más brillantes del firmamento literario guatemalteco.
