El tueste del café en Guatemala es una fase esencial, pues es la que resalta la calidad y los sabores únicos del grano, los cuales se desarrollan desde su cultivo en regiones como La Antigua, Huehuetenango y Atitlán.
Es por medio de este proceso que se liberan los aceites y aromas, transformando los granos verdes en granos marrones, listos para molerse y preparar el café. El tueste varía según la región, el clima y la altitud; estos factores contribuyen a sabores característicos como notas frutales, achocolatadas y florales, con un toque de acidez.
En Guatemala, el tostado puede ser medio o fuerte, dependiendo del perfil de sabor buscado. Los tostadores guatemaltecos prestan especial atención al control de temperatura y al tiempo de tostado para asegurar una calidad constante.
Un tueste ligero puede resaltar la acidez y las notas florales, mientras que un tueste más oscuro, intensifica el sabor y el cuerpo, generando un café más robusto. El cuidado de los productores guatemaltecos en el tostado, contribuye a que el café guatemalteco sea reconocido a nivel mundial por su complejidad.