El lavado de manos adecuado es una acción fundamental para reducir el riesgo de infecciones y enfermedades transmitidas por microorganismos presentes en el ambiente, lo que puede afectar la salud y alimentación de las personas. Esta práctica es especialmente relevante en entornos escolares, donde los niños están expuestos a diversos agentes patógenos.
En ese orden de ideas, en la comunidad de Chutiestancia, San Andrés Semetabaj, Sololá, se llevó a cabo un taller enfocado en la promoción de buenas prácticas de salud y nutrición, centrado en el hábito del lavado de manos.
Esta iniciativa fue coordinada por un equipo intersectorial conformado por representantes de la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (SESAN) de la Presidencia de la República, el Programa del Ejercicio Profesional Supervisado Multidisciplinario (EPSUM), la municipalidad de San Andrés Semetabaj a través de la Oficina Municipal de Protección de la Niñez, Adolescencia y Juventud (OMPNAJ), el Centro de Atención Permanente (CAP) de San Andrés Semetabaj, y la Dirección Departamental de Educación local.
El objetivo principal fue educar a los estudiantes de quinto y sexto grado de primaria sobre la importancia del lavado de manos para prevenir enfermedades gastrointestinales. Durante la actividad, los estudiantes recibieron información detallada sobre la técnica correcta de lavado de manos, así como sobre la importancia de hacerlo en momentos clave, como antes de comer y después de usar el baño. Además, se les enseñó a elaborar lavamanos artesanales utilizando materiales accesibles y económicos, con el fin de promover la réplica de la práctica en sus hogares y comunidades.
Esta iniciativa busca no solo mejorar la salud de los estudiantes, sino también empoderar a la comunidad para adoptar medidas preventivas simples pero efectivas. Al educar a las nuevas generaciones sobre la importancia del lavado de manos, se sientan las bases para un futuro más saludable y resiliente en Chutiestancia y otras localidades de Sololá.