El Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), por medio del personal del Viceministerio de Seguridad Alimentaria (VISAN) y la Dirección de Coordinación Regional y Extensión Rural (DICORER), continúan con la entrega del Bono Campesino en su modalidad de autoconsumo, el cual beneficia a miles de agricultores y agricultoras con insumos esenciales para fortalecer la producción agrícola y garantizar la seguridad alimentaria en todo el país.
En esta ocasión, las entregas se realizaron en los siguientes municipios:
• Huehuetenango: Santa Eulalia (piochas y semillas de hortalizas).
• Jutiapa: Agua Blanca (semilla de maíz y herramientas agrícolas).
• Quiché: San Gaspar Chajul (abono orgánico).
• San Marcos: Sipacapa (abono orgánico, semillas de hortalizas y bombas de aspersión).
• Chiquimula: Camotán (abono orgánico y bombas de aspersión) y San Juan Ermita (Bombas de aspersión, semillas de hortalizas, semillas de maíz y piocha).
• Sololá: Sololá (abono orgánico, semilla de hortalizas, piocha y bomba de aspersión).
Beneficios de los insumos entregados
Las bombas de aspersión facilitan la aplicación uniforme de líquidos como fertilizantes y herbicidas, permitiendo controlar plagas y enfermedades. Además se optimizan recursos y tiempo, logrando mejorar el desarrollo de las plantas mediante fertilización eficiente.
El abono orgánico es un fertilizante natural que aporta nutrientes esenciales al suelo y cultivos, contribuyendo a incrementar la fertilidad del suelo, reducir el uso de productos químicos y se promueven prácticas sostenibles.
La piocha es una herramienta versátil que contribuye a mantener el suelo en óptimas condiciones, lo que resulta fundamental para lograr cultivos saludables y productivos.
Las semillas de hortalizas permiten a las familias agricultoras a cultivar alimentos frescos y nutritivos en sus propios terrenos, mejorando su seguridad alimentaria y reduciendo la dependencia de alimentos comprados. Se fomenta la siembra de diferentes tipos de hortalizas para enriquecer la dieta familiar y se reduce el riesgo económico en caso de pérdidas en un solo cultivo.
La entrega de semillas de maíz ICTA B-7, la cual garantiza una mayor productividad por área cultivada, ayuda a los agricultores a obtener mejores cosechas en comparación con otras tradicionales. Esta variedad de maíz es más resistente a enfermedades, plagas y condiciones climáticas difíciles, como sequías moderadas, lo que asegura una mayor estabilidad en la producción.
El Bono Campesino no solo proporciona insumos esenciales, sino que también fomenta el desarrollo integral de las comunidades rurales. Estas acciones se enmarcan en el plan “Una nueva siembra para el agro de Guatemala”, las que están alineadas al objetivo uno: “incrementar la productividad, la disponibilidad, el acceso físico a los alimentos de manera oportuna”.
