La Tabla Nacional de Atribuciones de Frecuencias (TNAF) es una herramienta muy importante que organiza el uso del espectro radioeléctrico, que es el espacio por donde viajan las señales de radio, televisión, internet, celulares y otros servicios de comunicación.
Para que todos estos servicios funcionen correctamente y no se interfieran entre sí, la Superintendencia de Telecomunicaciones (SIT) actualizó esta tabla, asegurando así un uso más eficiente y ordenado de estas frecuencias en todo el país.
La TNAF es como un mapa que dice qué frecuencias se usan para qué servicio. Por ejemplo:
- Las frecuencias de 88 a 108 MHz se usan para la radio FM que escuchamos a diario.
- Las de 3.4 a 3.6 GHz pueden usarse para internet 5G, que permite navegar más rápido.
- Otras frecuencias están reservadas para emergencias, vuelos, seguridad pública y televisión.
Gracias a esta organización, se mejora la calidad de los servicios de comunicación, se impulsa la llegada de nuevas tecnologías y se garantiza que todos podamos disfrutar de mejores conexiones y comunicaciones seguras.
Estructura de la TNAF
La TNAF, elaborada conforme a la Ley General de Telecomunicaciones, asigna bandas de frecuencias a distintos servicios de telecomunicaciones reconocidos internacionalmente. Su consulta es indispensable para cualquier inversionista o entidad interesada en desarrollar sistemas de radiocomunicaciones en el país, ya que permite conocer con certeza los rangos de frecuencia disponibles y sus respectivas atribuciones.
Una herramienta vital para la evolución de las telecomunicaciones
La actualización de la TNAF se realiza aproximadamente cada cuatro años, tomando como referencia las decisiones adoptadas en las Conferencias Mundiales de Radiocomunicaciones. Su objetivo es facilitar el desarrollo continuo del sector, brindando seguridad jurídica a los inversionistas y fomentando la innovación tecnológica en Guatemala.
Con esta medida, el país refuerza su compromiso con la modernización de las telecomunicaciones y la optimización de los recursos radioeléctricos, asegurando un crecimiento sostenible y una mejor conectividad para la población.