En cumplimiento a instrucciones giradas por el Presidente Bernardo Arévalo, agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) y soldados del Ejército de Guatemala mediante operativos combinados han reforzado la seguridad en áreas de alta incidencia criminal de la ciudad capital y varios departamentos del país. Estas medidas han priorizado la instalación de puestos fijos y móviles en vías públicas y lugares estratégicos para garantizar la protección de los ciudadanos.
También han permitido incrementar el acercamiento entre las fuerzas de seguridad y las comunidades, así como fomentar la denuncia ciudadana, la cual es fundamental para brindar una respuesta inmediata ante posibles delitos y prevenir hechos ilícitos que puedan poner en riesgo la vida, integridad y bienes de la población durante esta época del año.
El presidente Bernardo Arévalo afirmó que la estrategia busca aumentar la presencia de las fuerzas de seguridad en zonas afectadas por el crimen, y explicó que la medida no se trata de una militarización de la seguridad ciudadana, porque los operativos están a cargo de las fuerzas policiales, y el Ejército sólo apoya a las tareas de protección pública en el país.
Por su parte, el Ministro de Gobernación, Francisco Jiménez, señaló que los patrullajes liderados por la PNC estarán vigentes hasta fin de año y buscan recuperar el control de territorios, prevenir nuevos hechos de violencia y proteger a la ciudadanía. Además, subrayó que las acciones demuestran el compromiso de la actual administración gubernamental con la seguridad y el bienestar de la población.
En operativos recientes en distintos sectores y rutas principales de los departamentos de Escuintla y Petén, las fuerzas policiales y militares identificaron a 113 personas para verificar que no tuvieran órdenes de captura vigentes. Además, inspeccionaron 81 vehículos para asegurarse de que no transportarán algún objeto ilícito.
La estrategia implementada desde el 19 de octubre en curso por los Ministerios de Gobernación (Mingob) y la Defensa Nacional (MDN) también prioriza esquemas de seguridad en los alrededores de centros penitenciarios, con patrullajes motorizados y recorridos para fortalecer los controles, combatir las extorsiones y delitos conexos, y prevenir el ingreso de objetos prohibidos a estos recintos.